Hace unas semanas tuvimos la oportunidad de conocer de cerca la Panadería de Hnos. Sánchez Grande en Arroyomolinos de León (Huelva). El pan que nos hacen llegar cada lunes y jueves a las comadres es un pan elaborado con masa madre, harina de trigo, pan de hogaza artesano, el típico pan de pueblo ideal para las tostadas, con textura esponjosa y olor a pan del de siempre. Fernando y su familia nos abrieron las puertas de su casa (literalmente ya que la panadería ocupa la planta baja).
Allí tuvimos el placer de escuchar su historia, formas de elaboración del pan, tiempos de fermentación de las masas… incluso nos presentaron a su masa madre…¡enorme!. Lo bonito fue darnos cuenta de como todo esto está ligado a la historia de un pueblo que contó en su momento con más de 30 molinos en activo que funcionaban gracias a las aguas de los Arroyos Abismo-Morena y Valdelamadera. Fernando nos cuenta…«En aquellos tiempos, se cambiaba trigo por harina. Era muy habitual entre los jornaleros. Ellos llevaban trigo a los molinos, que como has visto abundaban en el pueblo y recogian harina que luego cambiaban por pan. Ese intercambio de trigo, harina y pan lógicamente tenía un coste, se le conocía aquí como Maquila. También los agricultores y ganaderos solian comprar el pan por años, por ejemplo, recogian durante el año el pan en la panadería y luego cuando vendían el ganado o recogian la cosecha de aceituna le pagaban al panadero. Habia unos vales que se utilizaban. Cada 40 vales se le denominaba Data»
Bonitas historias para recordar que esperamos no caigan en el olvido. Fue en aquellos tiempos cuando nació la panadería, hace exactamente 68 años. En los años 50 el padre y la madre de Fernando comenzaron a ejercer el oficio. En aquel entonces existían 8 panaderías en todo el pueblo. En la actualidad esta es la única que queda en funcionamiento. Hoy en día, Fernando y su familia la llevan adelante con esfuerzo y pasión, levantándose cada día a las 3 de la mañana y sonriendo mientras te lo cuentan. Venden sus panes en Arroyomolinos, Fuentes de León y Sevilla. Gracias a eso pueden mantenerse, ya que la venta del pan en el pueblo no es la misma que existía años atrás.
Fernando y sus hermanos se criaron apoyados en las caderas de su madre, María Josefa Grande Caballero, natural de Arroyomolinos de León, mientras ella pesaba y cortaba las masas para la elaboración del pan. Su padre, Antonio Sánchez Silva, criado también en este pueblo, mantuvo su honroso oficio de panadero hasta que alcanzó los 65 años. En aquellos tiempos una borriquilla (situada dentro de la panadería) daba vueltas a una rueda y hacía su función de amasadora, afinaba aún más la masa para conseguir un pan de mayor calidad. Fernando y sus hermanos aprendieron el oficio desde muy pequeños y con el tiempo han ido poco a poco modernizando la panadería, adquiriendo maquinaria que hiciera que el trabajo no fuera tan duro como cuando sus padres lo realizaban. Aún así siguen utilizando muchas cosas de antaño (el peso que usaba su madre, la artesa donde se amasaba…) Cariño y sabiduría unidos para realizar un pan que no pasa desapercibido para nadie. Las comadres estamos muy contentas de poder apoyar a gente que mantiene oficios tan importantes y dignos como este. Gracias por estar ahí, con personas así sabemos que otro mundo es posible y que lo seguimos construyendo.
Y como colofón… os dejamos con la hoja de pedidos de esta semana… ¡¡Os esperamos!!
